Marcos cede a las presiones de su madre y acepta un trabajo para una agencia, sin ser consciente de que tiene un contrato de exclusividad con otra. Andrés sigue explicando a Eva su dolor de amores con Gemma y no se da cuenta de que está haciendo mucho daño a su amiga. Eva, además, debe soportar reuniones de trabajo con una Gemma muy exigente con el negocio de Silvia. Quim debe confesar a Gerard que ha perdido los tóners. Su socio se lo toma muy mal. Además, siguiendo el consejo de Miquel, intenta hablar con su hijo, que le rechaza. Entonces tiene una visión.