Andrés se siente presionado porque no sabe cómo decirle a Juanjo que las mallas que se ha comprado para las clases de baile son horribles y hace el ridículo cuando las lleva puestas. Entretanto, la familia encarga a Amelia que distraiga a Laura en sus tediosos días de gestación. La asistenta, junto a Toti, se llevará a la joven al bingo, lo que desencadenará una crisis con los Hita.