Mirza Delibašić reinó en el baloncesto europeo de los años 70 y primeros 80. Su clase y su elegancia al frente del Bosna Sarajevo, del Real Madrid y de la mítica selección yugoslava le convirtieron en una leyenda. El estallido de la guerra de Bosnia le situó en una encrucijada dramática. Mirza decidió permanecer voluntariamente junto a su pueblo en lugar de escapar con su familia convirtiéndose así en un héroe nacional. Hoy, su hijo Danko trata reconstruir la historia del hombre detrás del mito.