Martin toma fotografías guiado por las percepciones y descripciones de los otros. Martin es ciego y, con esta rara práctica para un invidente, él prueba que el mundo es realmente cómo los otros se lo describen. A pesar de su carácter prepotente y autosuficiente, Martin necesita de los cuidados de Celia, una atractiva mujer que lo ama desde hace tiempo y con quien mantiene una sádica relación. La llegada de Andy, un fornido y solitario lavador de platos de un restaurante a la vida de Martín, hace que estos personajes se involucren en un triángulo de relaciones en el que alternadamente se abusan y aman entre sí...